Si es que es así, sólo lo enfrentan de diferente manera; mientras las personas "normales" suben la cabeza y enfrentan las cosas, yo me escondo en mi habitación, escribiendo cosas a extraños invisibles detrás de pantallas luminosas. Gente que no está realmente interesada en lo que escribo y "probablemente" solo buscan una manera de desaburrirse o salir de su cotidianidad.
Bueno pues yo me encuentro en un momento díficil en mi vida; difícil para mí por supuesto, no queda mucho de la que fui cuando "soñadoramente" decidí abrir este blog con ideas y fantasías de un tinte rosa y perfecto, no, ahora sólo es una manera de desahogarme de mis frustaciones y tristezas.
Lo dicho, sólo soy una persona más en este mundo, alguien que busca una manera de desahogo como tantas otras.
Recaí en mi vicio, el tabaco, no estoy arrepentida, la verdad es algo que me gusta hacer, el cigarro me libera mientras me encadena más y más a ser dependiente a él.
Irónico ¿no?
De eso esta hecha la vida, de ironías y paradojas.
Así que aquí estoy, encerrada en mi habitación, con mi laptop prendida y buscando una razón escurridiza una razón o motivo que me dejen e insipiren a seguir mi camino; un camino que si bien antes parecía derecho y... correcto. Hoy no lo es más.
Es más, es tanta la confusión que me invade que simplemente ya no está. Estoy en un gran negro o blanco vacío, depende de la persona; tratando de encotrar el camino perdido.
Que poético suena, pero que real es...
Una recomendación para los pocos que leen esto, o tal vez para nadie: "Nunca pierdan de vista su CAMINO" y digo camino porque sabemos, que los objetivos cambian una y mil veces a lo largo o corto) de nuestra vida.
Sí, no pierdan su camino, se los imploró; porque una vez que lo pierden es muy difícil volverlo a encontrar y se verán a sí mismos reducidos a un despojo de quienes pudieron ser; inclusive cuando no sepan qué es lo que estan buscando. Sólo sigan adelante, con la idea fija de que será el camino el que los encuentre a ustedes, y mientras tanto no dejen de disfrutar los muchos (o pocos) buenos momentos que nos regala la vida. Guárdenlos con celo y no los compartan con nadie, sólo con ustedes mismos, y si los llegan a compartir, sean cautelosos porque así como eso los puede hacer inmensamente felices, en las manos equivocadas los puede destruir moralmente.
Dado que me he desviado del tema no me queda más que terminar esta "entrada" aburrida, sin razón de ser [como todo lo que publico] deseándoles un sendero tranquilo, lleno de alegrías y retos, pero con muuy pocas desgracias.
